“La inteligencia artificial no reemplaza al humano, lo potencia”: experto en IA Juan Villamil analiza los retos y beneficios de la tecnología

Descubre cómo la inteligencia artificial está revolucionando empresas y educación de la mano de Juan Villamil, un experto con más de 15 años de experiencia. Hablamos sobre los beneficios de la IA para pequeñas empresas, los retos éticos, su impacto en la empleabilidad y el papel de la academia en un mundo digital. Aprende cómo la IA puede potenciar tu negocio y transformar la manera en que trabajamos y aprendemos.

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La inteligencia artificial (IA) no solo está transformando la manera en que las empresas operan, sino que también está rediseñando el panorama de la educación y el mercado laboral. En este contexto, conversamos con Juan Villamil, un reconocido especialista en tecnología con más de 15 años de experiencia liderando proyectos de innovación. Juan Villamil ha trabajado en sectores clave como el transporte, la banca y el gobierno, desarrollando soluciones tecnológicas que han marcado una diferencia en Colombia y el mundo.

Formado en instituciones de renombre como el MIT y el Tecnológico de Monterrey, y mentor en la Cámara de Comercio de Bogotá, Juan Villamil combina su profundo conocimiento técnico con una visión práctica de cómo la IA puede potenciar tanto a las empresas emergentes como a los grandes actores de la industria.

En esta entrevista con Sebastián Mejía, director de SMH 360, comparte su perspectiva sobre cómo la IA democratiza el acceso a herramientas avanzadas, permitiendo a pequeñas empresas competir en un entorno tecnológico dominado históricamente por grandes corporaciones. Esta entrevista hace parte de un informe especial sobre el impacto de la IA en diversos sectores, que realiza SMH 360 en conjunto con el podcast Reflexiones Artificiales de SMH Podcast.


Sebastián Mejía: Llevas más de 15 años, digamos, en el mundo de la tecnología y trabajando con diferentes empresas y quisiera empezar preguntándote ¿qué fue lo que te motivó a entrar en el mundo de la inteligencia artificial, en este mundo tan cambiante?

Juan Villamil: ¿Qué me invitó? Lo que me invitó realmente fue la pasión. Desde pequeño me gustaba saber cómo funcionaban las cosas, entonces siempre buscaba cómo desarmar el carrito, cómo hacer esta lógica y siempre me apasionó este mundo de saber qué había más allá.

SMH: Viendo el tema de la inteligencia artificial, que es un tema muy movido, muy cambiante, ¿qué crees que es clave o cuáles son las habilidades esenciales o esos aspectos que tú consideras importantes precisamente para triunfar en este ámbito?

JV: Los aspectos claves para triunfar en la inteligencia artificial. De hecho, yo doy clases, de hecho en mis clases en la universidad enseño a utilizar a diferentes estudiantes de diferentes carreras sobre inteligencia artificial y el consejo es el mismo: tiene que tener usted empatía por el ser humano porque pues la IA es una herramienta no nos va a pues por el momento a reemplazar entonces tener empatía por el ser humano que está al otro lado que es lo que yo deseo automatizar le entender cuál es su problema de fondo tener la comunicación clara. Si yo no soy lo suficientemente claro con una idea, muy posiblemente va a ser algo incorrecto y no lo que yo necesito que haga. Creo que en eso se podría resumir como los consejos generales para cualquier profesional que desee manejar una inteligencia artificial.

SMH: No ves que sea posible que la inteligencia artificial reemplace a los humanos y ese es precisamente uno de los aspectos que más se critica y que más se cuestiona por el público general de la inteligencia artificial. de que eso va a llegar a reemplazar a los seres humanos o va a eliminar trabajos. ¿Cómo sería en el futuro, pues cómo se verá en el futuro el tema de la empleabilidad, pues precisamente con la llegada de estas inteligencias artificiales?

JV: Sí va a haber un cambio, hay una transición importante. De hecho, para el sector agro, cuando salieron las máquinas de arado, se pensó pues que el campo se iba a acabar, que los campesinos se iban a acabar, que las cosechas se iban a hacer todas con máquinas y que pues iba a generar un gran desempleo. Si usted mira los sembradíos de papa, todavía hay seres humanos operando estos sembradíos, operando estas máquinas, lo que tuvieron que hacer los campesinos fue tecnificarse y aprender a manejar motores. Eso les dio como una ventaja competitiva. No sacó al campesino de la ecuación, fortificó al campesino. Yo tengo maestría en inteligencia artificial y yo no temo que una IA me quite el trabajo. De hecho, yo utilizo diariamente muchas inteligencias artificiales y es como lo que soñábamos cuando pequeños. Siempre queríamos ser súper poderosos, nos colocábamos la capa que era la toalla y queríamos volar. Eso lo podemos hacer actualmente con la inteligencia artificial. Yo soy 10 veces más productivo porque utilizo muchas IAs que son como asistentes a mi servicio. No me quita el trabajo, pero sí me lo potencia. El único caso donde de pronto veo cierto riesgo es en esos casos donde de pronto el profesional se encargó de formarse copiando en alguna IA, copiando y pegando los trabajos. Donde de pronto la formación y el trabajo es tan repetitivo que no hace falta ni siquiera un ser humano, porque de hecho la ingeniería de sistemas se inventó para automatizar procesos y no se inventó hace un año, ni hace dos, hace más de 50 años existe la ingeniería de sistemas y los programas.

Creo que en esas labores de pronto va a haber un poco de riesgo. En los próximos 10 años yo estoy seguro que la inteligencia artificial va a ser una potencialidad para el ser humano. De hecho, hace poco Estados Unidos sacó una circular donde los profesionales que sepan manejar inteligencias artificiales son primordiales para conseguir visa, para conseguir trabajo en Estados Unidos y tienen un tratamiento especial porque es algo de seguridad nacional. Saber implementar inteligencias artificiales y no habla de ingenieros, o sea, en ningún lado dice ingenieros, en ningún lado dice. No, dice cualquier profesional que sea capaz de manejar una IA. Entonces, en ese sentido sabemos que, no creo que vaya a cambiar. También fue el miedo cuando salió el Internet. Entonces, todos los que hacían consultoría, servicios, dijeron, no, pues, ya se va a acabar mi trabajo, porque uno busca en un navegador y aparece toda la información. ¿Se acabó el trabajo? No. Hay 20.000 empresas de consultoría, sin importar que la gente pueda buscar en Google cierta información, necesita la empatía del ser humano al otro lado, que entienda el caso de uso, que entienda qué es lo que hace la empresa, y pues no se acabaron las empresas de servicio. Creo que cuando se tecnificó con Google, crecieron más empresas de servicios, de hecho se democratizó la información, que era algo que era muy complejo de acceder, en los 80s, en los 70s, y en décadas anteriores.

SMH: Antes de eso mencionabas el tema de la inteligencia artificial y un poco el tema de la academia, ¿sí? Como docente cómo crees que se va a adaptar o qué desafíos tendrá que abordar la academia y las diferentes facultades precisamente para lograr adaptarse y crear formaciones que sean óptimas para los profesionales del futuro.

JV: Creo que ya se adaptó. O sea, creo que las que no se han podido adaptar están perdiendo terreno. De hecho, creo que la educación en el mundo ya se adaptó a la inteligencia artificial. Las que están rezagadas de pronto son las universidades que poco brillan o son las academias que poco brillan y pues van a quedar rezagadas en el tiempo y de pronto van a cerrar. Pero las universidades famosas que todos conocemos ya se adaptaron hace un montón de tiempo a este tipo de educación. Hay varias adaptaciones. De hecho, la academia está respondiendo, creo que de una forma al unísono a la industria, que era algo de pronto que estaba desligado en Colombia, similar al modelo norteamericano, donde la universidad trabaja de la mano con la empresa, y pues veo varias adaptaciones.
Adaptación número uno, que en casi todas las materias de estas universidades que son pioneras, la inteligencia artificial es un eje fundamental de todos los ejercicios. No estamos haciendo lo que pasaba en el oscurantismo, con la iglesia católica y con Copérnico, donde tener ideas innovadoras era sancionado con la horca, sino creo que estamos en la época donde se le invita a los estudiantes a que utilicen inteligencias artificiales porque potencian sus cualidades. Y los ejercicios se hacen de tal manera que resuelvan problemas reales, ya no teóricos como en los 90, como en los 2000, que era un problema teórico, vaya, averigüe y haga un caso de estudio que no tiene nada que ver con la realidad, sino ahora, coja una IA y resuelva un problema en la realidad.

Creo que eso ya está pasando. Hace poco en una conferencia para un gremio específico, la mitad se oponía. Misma lógica de la iglesia en ese momento, donde no se oponen a esas nuevas ciencias, pero soy mentor para la Cámara de Comercio de Bogotá, para las empresas mega, las empresas más grandes del país, y las empresas que van siendo punta de lanza, o sea, las que más factura, las que son más grandes, son las que están no aborreciendo estas tecnologías, sino que las incluyen dentro de sus procesos, forman a todos sus funcionarios y hacen que sea 10 veces más rentable la empresa, 10 veces más ágil, y sus funcionarios los potencian con inteligencia artificial. Yo ya creo que hay una sinergia entre la educación y la IA. Muchos la satanizan, que es que no se debe utilizar. Es como si hoy yo le dijera a alguien, no pues. No utilice Excel, o sea, coja un papel y haga las divisiones con papel. Sería impráctico. No utilice Google, o sea, vaya, coja el bus, vaya hasta la biblioteca más cercana y averigüe allá. No, ya no, eso es impráctico. Y creo que las universidades ya se están adaptando a este cambio.

SMH: Si hablamos del tema de las universidades y vemos, por ejemplo, que la inteligencia artificial, pues, facilita un poco el proceso de aprendizaje, ya que se le puede preguntar y contra preguntar, con base al tema que se desea aprender, ¿cuál será un poco el futuro de las academias precisamente, o de los docentes para formar a los demás estudiantes? Es decir, ¿cuál será el factor diferencial entre un docente humano y una inteligencia artificial?

JV: Pasa lo mismo actualmente. O sea, creo que es el mismo factor diferencial. Cito a la DIAN. La DIAN le dice, haga usted mismo su declaración de renta. La DIAN es una institución bastante grande, tiene varias inteligencias artificiales llamadas RPA que automatizan el proceso para la declaración de renta. Yo podría hacer mi declaración de renta yo mismo, con ese eslogan que hacen ellos, pero ¿cuál es el diferencial por el cual yo llamo a mi contador y le digo venga, compadre, tómenos un café y hágame la declaración de renta? Porque esa persona que yo estoy llamando tiene empatía. Si yo cometo cualquier error dentro del portal de la DIAN, me multan. Si yo hago un error dentro de mi empresa, gracias a que una IA no me orientó correctamente, la IA no tiene empatía. La IA no tiene creatividad, porque para tener creatividad hay que tener cuerpo físico, hay que tener intestinos, hay que poder enamorarse, tener sentimientos. Eso la IA no lo puede replicar.

En ese sentido, creo que el factor diferencial es el mismo diferencial que hay en este mismo momento, porque en esa misma lógica, ¿yo para qué voy a la universidad? Yo solamente googleo y consigo 20 mil informaciones en Google y pues nunca voy a la universidad. Realmente no funciona. Sabemos que las universidades más prestigiosas es porque tienen ciertos profesores con experiencia vivencial, o sea, experiencia humana, que pueden hablar. desde su experiencia como seres humanos de los fracasos, de los éxitos, y pueden orientar de una forma única a sus estudiantes. Entonces, pues en ese sentido creo que no hay, como no hay una discusión de yo decir, o pregunto a Google, o voy a la universidad, o miro un video en TikTok, o voy a la universidad, tampoco está la discusión de si le pregunto a la inteligencia artificial o voy a la universidad. Yo creo que el profesor puede orientar con su experiencia a utilizar estas IAs, pero creo que lo más valioso, más que una plataforma, más que una herramienta, es como la vivencia del profesor, la experiencia como ser humano y la orientación que le puede dar a sus estudiantes. Intente hablar con un curso virtual, es imposible. ¿Qué pasa si usted tiene una pregunta que desea hacérsela a alguien que esté pasando por un problema suyo?

SMH: Tocando el tema de empresas, al ser mentor en el tema de la Cámara de Comercio de Bogotá y uno de los beneficios que precisamente tiene la inteligencia artificial, sobre todo las IAs generativas, para las pequeñas empresas y para los emprendedores es precisamente de solucionar y apoyarles en el tema por ejemplo de creación de contenido también de copywriting, ¿como sean esos beneficios y cuáles son los principales beneficios precisamente para las empresas emergentes del uso de las inteligencias artificiales?

JV: Hay grandes beneficios. Digamos uno de los que más hemos identificado y hoy tuve como cuatro reuniones con cuatro empresarios que desean implementar y has dentro dentro de sus procesos y la lógica es la misma. El pequeño empresario latinoamericano no tiene el mismo capital que el microempresario europeo o norteamericano. Eso significa que aquí hay una escasez de dinero. Contratar a una persona vale lo que valga la persona, más el 45%, que son cesantías, pensiones, todos estos pasivos que hay. Entonces, y pues casi nadie trabaja por el mínimo, ¿no? Si hay un sueldo mínimo en ciertas áreas, son 3 millones de pesos. Más todo lo de ley son como 4 millones y medio. Entonces, a veces el microempresario ya hablaba con uno que le va bien, pero es una sola persona. Es una sola persona y una secretaria que le ayuda a agendar citas.

El mayor beneficio es que con estas tecnologías se democratiza una tecnología que solamente antiguamente tenían acceso los grandes. La IA no es de ahorita, o sea, la IA se volvió famosa con ChatGPT. La IA tiene sus bases, como en los años 50, para la Segunda Guerra Mundial. Se volvió muy fuerte a nivel mundial para las grandes empresas, no para las pequeñas, por el costo. Hace más o menos unos 15 años. Entonces realmente la inteligencia artificial está dentro de nosotros hace más de una década, casi dos, masivamente, pero no era asequible para los pequeños empresarios. Costaba tanto que era muy difícil poder acceder a ella. Entonces ahorita le dan herramientas muy grandes a empresas muy pequeñas para que ellos puedan crecer como crecieron los grandes.

SMH: ¿Cuáles son un poco esas recomendaciones que se le pueden entregar también a las empresas para hacer uso de manera eficiente de la inteligencia artificial y precisamente beneficiarse de esa democratización de las tecnologías?

JV: Daría varias recomendaciones. Recomendación uno, busque mentoría de un ser humano para que le enseñe a manejar las ideas con base en su negocio. Su negocio es único. Tener un curso genérico va a hacer que usted pierda, bueno, pues va a ganar ciertas skills, ciertas habilidades, pero va a ser un curso genérico. Usted no le puede preguntar el curso. Ese curso no lo va a enfocar a usted a resolver su negocio, pero se va a fusilar un montón de tiempo. O sea, busque una formación específica para que alguien lo oriente con base en su negocio, como sacarle el mayor provecho a esa tecnología. Si no, lo que usted va a hacer, digamos un caso, ejemplo, conozco una empresa que ellos comenzaron a utilizar ChatGPT, daban 7 prompts con el daño ambiental que eso significa. Porque pues cada vez que hay un prompt se gastan dos vasos de agua para hacer una función que con solamente una orden la podría sacar. Pero la señora no sabía. Había hecho un cursito virtual de unos dólares y había aprendido una forma generalizada. Porque pues lo que hacen ellos para optimizar esas ganancias de los cursos es hacer cursos generales. Pero pues todas las empresas no se parecen y todas las empresas no hacen lo mismo.

Dos, verifique cuál es el proceso que más les duele. Porque una cosa es utilizar esas inteligencias para que me den ideaciones, como esos LLMs que son gratis, y con una buena mentoría usted lo va a optimizar. Y otra cosa son las IAs, que automaticen procesos dentro de su empresa. Entonces, digamos, en esta busque la mentoría de una buena academia, un buen instructor, para que lo oriente rápido, de la forma más inmediata, con esta otra, mire qué es lo que más le duele a su empresa. ¿Cuál es el proceso más costoso? ¿Cuál es el proceso que está generando más errores? Y pues intente automatizar eso. No lo intente hacer todo solo. Creo que ser el chico orquesta es el problema de mucho empresario latinoamericano. Quieren hacer todo solo. Es bueno pedir ayuda. Y más si una empresa, si alguien los puede orientar y resolverle lo que usted tiene en un día. a que usted se ponga a testear un mes, dos meses, tres meses, siete meses, porque la competencia ya resolvió lo que ese pequeño empresario hasta ahora va a testear.

SMH: Para hacer unas conclusiones un poco generales, lo que más mencionas es que la inteligencia artificial precisamente no reemplaza a los humanos por el tema de la empatía y de la creatividad. Pues viendo un poco el avance de la inteligencia artificial, sobre todo en estos últimos años, ¿Existirá alguna fecha puntual o existirá en algún futuro el momento en el que la inteligencia artificial logre dominar esas habilidades, esas cualidades?

JV: Pues hay unos papers del MIT que hablan de dos tecnologías complementarias que todavía no están suficientemente desarrolladas. O sea, son papers científicos. Un paper habla sobre la computación cuántica. La computación cuántica tiene una capacidad increíble de resolver problemas, pero todavía no hemos resuelto problemas de esa computación completamente, tanto que para poder entender la computación cuántica hay que colocar una computadora normal para que nos traduzca, porque todavía no hemos resuelto eso. Y la inteligencia artificial, del otro lado, teóricamente, o sea, siendo muy benefactor, muy posiblemente la computación cuántica en el 2050 ya podamos entenderla bien e integrarla con inteligencia artificial. De hecho, fue un tema de discusión en una clase. Yo tuve el privilegio de estudiar en MIT. en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, quien ha inventado las bases de la IA, quien inventó el Internet, y una de las discusiones en una clase fue esa, o sea, ¿cuál va a ser el futuro? Entonces el futuro, desde la universidad número uno de ingeniería en el mundo, al unísono, es cuando se pueda unir la computación cuántica con la inteligencia artificial. Puede ser a mitad del siglo, más o menos, esperemos estar todavía viejitos, pero buenos para esa época para poderlo ver.

SMH: Quiero cerrar preguntándote por los desafíos éticos que aborda precisamente la inteligencia artificial. Sobretodo en el tema de generación de contenidos donde vemos que la inteligencia artificial es capaz de crear contenido, por ejemplo, en textos muy similar al de los seres humanos y es capaz también de crear contenidos en imágenes para crear situaciones irreales o alterar de manera digital imágenes, audios, inclusive también videos. ¿Cuáles son esos desafíos éticos que debe abordarse en el tema de la inteligencia artificial?

JV: Creo que siempre han estado los desafíos éticos. De hecho, pues no sé, la segunda guerra mundial con la bomba atómica. La tecnología no es buena ni mala. El ser humano puede tomar decisiones, ¿no? Si utilizar la tecnología para el bien o para el mal. Sacando un ejemplo un poco más amplio, pues el estudiante siempre ha tenido la posibilidad de copiar en internet, copiar y pegar, o tener el texto y parafrasearlo, no es actual, eso viene desde siglos antes. De hecho Sócrates lo decía, ¿no? También, o sea, desde su época porque era profesor. Ahora hay nuevos desafíos porque facilita más esta lógica, pero creo que ahí viene el enfoque, ¿no? O sea, deberíamos utilizar estas herramientas para resolver problemas reales y no quedarnos en cosas repetitivas, porque de hecho ya Google está perdiendo la relevancia, porque ya ChatGPT busca en Internet, ya la gente busca más en ChatGPT que en Google, simplifica la información y le da cierta lógica a uno, entonces creo que lo interesante sería contrarrestar eso y contraponerlo con la realidad.

Siempre han habido desafíos éticos, ¿no? En todas las profesiones, ¿no? Si yo soy de las fuerzas militares, entonces tengo ciertas lógicas éticas, pero si yo soy abogado también tengo ciertas lógicas éticas, si yo soy ingeniero también tengo ciertas lógicas éticas. Lo único que hace la inteligencia es potenciar mi lógica como ser humano. Creo que sería una buena lógica, de hecho lo dijo el CEO de NVIDIA, donde debemos potenciar las carreras y las cualidades del ser humano. Debemos, creo que, enfatizarnos en esa ética del ser humano. Y creo que el ser humano, de hecho, si lo miramos desde la antropología, debería ser el centro, no la máquina. La máquina es una herramienta. Como en este momento que hay una herramienta, una cámara, una computadora, que nos sirve de herramienta para nosotros. Claramente la IA saca un montón de contenido, pero la mayoría es genérico. no es capaz de hacer contenido tan auténtico como lo hace un ser humano.


La inteligencia artificial está aquí para quedarse, no como una amenaza, sino como una herramienta poderosa para potenciar las capacidades humanas y transformar industrias enteras. A través de esta conversación con Juan Villamil, queda claro que el futuro no solo está en manos de quienes dominan la tecnología, sino también de aquellos que la utilizan con empatía, creatividad y visión estratégica.

Desde la democratización de herramientas avanzadas para las pequeñas empresas hasta el rediseño de la educación para formar profesionales adaptados a esta nueva era, la IA nos invita a evolucionar y a encontrar nuevas formas de colaboración entre humanos y máquinas.

Si algo podemos aprender de esta entrevista es que la tecnología es tan buena como la intención de quienes la desarrollan y utilizan. El reto está en usarla sabiamente para construir un mundo más eficiente, innovador e inclusivo.

Autor: Sebastián Mejía

Periodista con más de cuatro años de trayectoria. Fundador y director de SMH 360 y el Sistema de Medios Hispanoamericanos. Apasionado por la IA, la tecnología y los viajes.

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